Japón, el país del sol naciente… Un país de contrastes en el que uno puede viajar en el tiempo.
Tan pronto te encuentras en un pueblo tradicional con casas de madera, baños termales al aire libre y jardines de ensueño propios de la período Edo, como estás en alguna de sus ciudades futuristas rodeado de edificios altos con luces de neón, salas de juegos recreativos y tiendas de manga.
Y esto, junto con una cultura muy diferente, la gastronomía y la hospitalidad de su gente, lo hacen un país muy especial.


En Japón hay una lista muy larga y variada de cosas que ver y hacer (y diferentes a muchos otros viajes). Maravillarse con sus templos y santuarios majestuosos, disfrutar de su gastronomía (una de las mejores que existen), relajarse en los baños termales de un ryokan tradicional, pasearse de noche entre altos edificios con luces de neón, pasar el rato en alguna sala de videojuegos o en un karaoke, maravillarse y relajarse con sus jardines tradicionales, ir a ver el Monte Fuji (una de las montañas más impresionantes que existe), pasearse por los barrios de geishas y quedarse petrificado al encontrarse con una de ellas…

Japón se encuentra en el Océano Pacífico y está formado por cuatro islas grandes principales (Honshu, Hokkaido, Shikoku y Kyushu) muy bien comunicadas entre ellas y rodeadas de más de 4.000 pequeñas islas.
La mayor parte del territorio es montañoso (más del 80%), mientras que sus ciudades son metrópolis con una alta densidad de población.

Antiguamente Japón era uno de los países más aislados y tradicionales; actualmente, es la segunda potencia del mundo y uno de los lugares más ansiados por los viajeros.
Cómo llegar
Hoy en día viajar a Japón es muchísimo más accesible que años atrás. Muchas compañías ya vuelan a este país ofreciendo tarifas muy baratas.
Hace años hablábamos de que un billete de ida y vuelta a Japón difícilmente bajaba de 800-900 euros; actualmente se pueden encontrar billetes fácilmente por 400-500 euros con compañías como KLM, AirFrance, Finnair, Alitalia, AirChina…
Además, tampoco se incrementa el coste por hacer la ida y la vuelta desde una región diferente de Japón, cosa que te permite organizarte una ruta por el país sin obligarte a perder tiempo volviendo al origen.
Nosotros por ejemplo escogimos un vuelo que llegaba al aeropuerto de Haneda (Tokio) y regresamos desde el aeropuerto de Kansai (Osaka). Volamos en noviembre con KLM, desde Barcelona, haciendo escala en París. Y los vuelos nos costaron 486’85€ por persona.
Cuando ir a Japón
Cualquier época es buena para ir a Japón, pero hay dos épocas altas destacadas: primavera y otoño.
Sin duda alguna la época más conocida es la primavera, por la fiesta del hanami, cuando se da la floración de los cerezos. Este fenómeno es imprevisible y dura muy poco tiempo, unas 3 semanas (de media se calcula que se suele dar entre el 25 de marzo y el 7 de abril).
Cada año miles de personas viajan a Japón den primavera para observar el paisaje teñido por los cerezos en flor. Durante esta época es difícil encontrar alojamiento y todos los precios se disparan. Pero creemos que ha de valer muchísimo la pena.

Pero lo que mucha gente desconoce es que en otoño en Japón se da otro fenómeno natural igual de impresionante y hermoso, el cambio de color de las hojas de los árboles. Es la época conocida como la festividad del momiji, en el cual los parques y las montañas se tiñen de rojos, amarilllos y marrones.
Este fenómeno dura más tiempo, unos tres meses, por lo que es mucho más fácil organizar un viaje para disfrutar de éste. Empieza a finales de setiembre y acaba en diciembre.
El momiji avanza de norte a sur (al revés que el hanami), por lo que el cambio del color de las hojas en la zona de Kioto y Tokio suele producirse alrededor de mediados de noviembre.
Nosotros, que queríamos disfrutar del momiji en su plenitud máxima, viajamos del 11 al 29 de noviembre, y disfrutamos de paisajes de ensueño… ¡Nunca antes habíamos disfrutado tanto del otoño!

Si visitáis Japón en la época del momiji os recomendamos que consideréis para vuestra ruta incluir Nikko, Kanazawa, el Lago Kawaguchiko, Kioto y Miyajima, que fueron los lugares en los que más disfrutamos de este fenómeno natural.

En cuanto al verano, se dice que hace mucho calor. Sin embargo, al ser agosto un mes en el que tienen lugar muchas festividades (además del mes en el cual los europeos solemos viajar más), también se considera temporada alta.
En invierno, en cambio, es temporada baja. Hace frío, pero se pueden disfrutar de hermosos paisajes nevados y vivir experiencias únicas como bañarse en un onsen (baños termales) al aire libre rodeado de nieve. Además, hemos visto fotografías de los pueblos de los alpes japoneses nevados y realmente están especialmente bonitos.
Nuestra ruta por Japón
Para hacer nuestra ruta en Japón teníamos algo claro, queríamos ver los imprescindibles, entre ellos las dos grandes ciudades de Tokio y Kioto, pero también disfrutar de la naturaleza y visitar zonas más tranquilas y rurales.
Disponíamos de 17 días en noviembre, época ideal para ver el momiji (el cambio de color de las hojas en otoño) por lo que priorizamos los lugares donde nos informamos que podríamos disfrutar bien de éste.
Finalmente, la ruta nos quedó así:
1. TOKIO 2. TOKIO 3. TOKIO 4. TOKIO – Excursión a NIKKO 5. TOKIO – Excursión a KAMAKURA 6. Excursión a LAGO KAWAGUCHI (Chureito Pagoda) 7. TAKAYAMA 8. Takayama – SHIRAKAWAGO – Kanazawa 9. KANAZAWA 10. MAGOME (Ruta Nakasendo: Magome–Tsumago) 11. KIOTO 12. KIOTO 13. KIOTO (Fushimi Inari Shrine y excursión a NARA) 14. KIOTO 15. HIROSHIMA – MIYAJIMA 16. MIYAJIMA – Osaka 17. OSAKA |
Cómo moverse por Japón
Para moverse por Japón tenemos tres opciones: tren, autobús o coche alquilado.
- Autobús: la opción más barata, pero no la más cómoda ni rápida. Se recomienda usar el autobús como principal medio de transporte solo si se dispone de mucho tiempo.
- Coche alquilado: alternativa muy buena para recorrer los alpes japoneses por ejemplo o otras zonas rurales a tu aire, sin depender de los horarios del transporte público.
- Tren: la opción más utilizada y, sin duda, la más cómoda. Es por tanto rápido, fácil de utilizar y cómodo; pero eso sí, caro. Aunque te ahorra tanto tiempo que casi siempre sale a cuenta. Los trenes más utilizados son los locales, los limited express, los rapid y los shinkansen. Estos últimos son los populares trenes bala, los trenes de alta velocidad, que te permitirán recorrer grandes distancias en poco tiempo. Normalmente unen las ciudades principales.

Japan Rail Pass (o JR Pass)
Si vas sumando uno por uno cada billete de tren, sobre todo si piensas utilizar muchos shinkansen durante tu ruta, verás que el precio se dispara exageradamente. Por esta razón es muy popular entre los turistas el uso de la JR Pass, un pase de uso ilimitado de trenes del grupo JR. Además de los trenes JR también incluye algún autobús y el ferry de Hiroshima a Miyajima.
La JR Pass solo puede ser utilizada por turistas (si estáis viviendo temporalmente en Japón, ya sea estudiando o trabajando, no podréis solicitarla). Se ha de comprar con antelación por internet, antes de viajar a Japón, aunque nos la entregan una vez allí. Hay varios puntos de venta oficiales; nosotros lo reservamos desde esta web.
Una vez la compras, lo que se te entrega es un vale, el cual te llega a través de FedExen unas 48h. Este vale lleva tus datos y es lo que tendrás que dar, junto a tu pasaporte, para que te lo canjeen por tu JR Pass (que también será de uso únicamente personal puesto que llevará tus datos). Has de tener en cuenta que no puedes comprar la JR Pass si faltan más de tres meses de antelación para tu viaje, pues 3 meses es el tiempo que tienes para canjear el vale. Os dejamos aquí el link con el listado de las oficinas donde podréis canjear vuestro vale por la JR Pass. Como veréis hay muchas, sobre todo en los aeropuertos y en las principales ciudades.
En la misma oficina, cuando recojas tu JR Pass, te preguntaran que día quieres activarla. No hace falta que la actives el primer día; nosotros pedimos que nos la activaran 3 días después de nuestra llegada (ya que los tres primeros días estaríamos en Tokio y preferíamos reservárnosla para cuando empezáramos a hacer desplazamientos más largos).

Hay dos tipos de JR Pass, la estándar y la Green Pass. Esta última seria como el billete de primera clase, para disfrutar de áreas más cómodas en los trenes shinkansen y en algunas líneas rápida. La JR Pass estándar es la más económica y utilizada (y la que nosotros escogimos y os recomendamos).
Para ambas existen las modalidades de pases de 7, 14 o 21 días, por lo que podéis escoger la opción que más se adapte a vuestra ruta. Nosotros estábamos 17 días, por lo que la modalidad que más se nos adaptaba era la JR Pass estándar de 14 días.
Precios de la JR Pass estándar:
7 días | 14 días | 21 días | |
Adultos | 230€ | 365€ | 467€ |
Niños | 115€ | 183€ | 234€ |
Hay que tener en cuenta que la JR Pass no funciona por horas, sino por días. Es decir, nos contará lo mismo si lo activamos un día por la mañana como si lo hacemos por la noche; y nos servirá para los siguientes 6, 13 o 20 días (según el pase que tengamos) hasta las 23:59h (la hayamos activado a la hora que la hayamos activado).
Con la JR Pass podemos reservar asientos sin ningún coste adicional. Así que si estáis seguros de algunos de los trenes que vais a coger, podéis reservar los asientos con antelación en cualquier oficina de reservas (llamadas midori no madoguchi). Así iréis más tranquilos y cómodos… Pensad que hay muchos vagones solo con asientos reservados y pocos para los que no tienen reserva, por lo que os recomendaríamos que si no tenéis reserva vayáis con antelación para coger sitio.

Para organizaros con antelación la ruta y el transporte que utilizaréis, os recomendamos la web de HyperDia, donde podréis buscar las diferentes combinaciones de trenes según el horario. Además podéis marcar la opción de JR Pass, por lo que ya solo os dará directamente las opciones con trenes que os entran con este pase. Os da también la duración, y en algunas ocasiones hasta la vía en la que llega o sale el tren.
Nosotros consultamos mucho el blog de Japonismo para organizar nuestro viaje a Japón. En el encontraréis una completísima guía con información muy detallada sobre la JR Pass y el funcionamiento de los trenes y otros medios de transporte en Japón.

Idioma y moneda
El idioma oficial es el japonés y es tan diferente a los idiomas europeos, que no hay manera de entenderlo sin una base…menos aún por escrito. Además, los japoneses en general no hablan inglés. Algunas personas que trabajan en el sector turístico sí lo hablan, por lo menos un poco…pero en general es bastante complicado comunicarse con la gente local en Japón. Eso sí, se esfuerzan por intentar hacerse entender.
Lo mismo pasa con la información en los sitios públicos e incluso en algunos lugares turísticos, no siempre la encontraréis en inglés. En los restaurantes en cambio, no es para nada complicado pedir, puesto que la carta suele estar también en inglés. Y en el caso de que no lo esté, siempre hay fotos de la comida o representaciones de los platos en la entrada.

La moneda oficial de Japón es el yen (¥). A día de hoy el cambio está a:
1¥ = 0,01€
1€ = 126,51¥
Se utilizan billetes de 10.000¥, 5.000¥, 2.000¥ y 1.000¥, y monedas de 500¥, 50¥, 10¥, 5¥ y 1¥. En las principales ciudades no tendréis problemas para pagar con tarjeta, pero fuera de las zonas turísticas quizá sí, por lo que aseguraros siempre de llevar dinero en metálico. Nosotros nos alojamos en un par de hoteles tradicionales en los que solo se podía pagar en metálico. No hace falta que llevéis todo el dinero en metálico encima puesto que es fácil encontrar ATM. De hecho hasta en algunos supermercados encontraréis (por ejemplo en muchos 7eleven). Es por esto que os recomendamos llevar una tarjeta que os permita sacar dinero sin comisiones. Nosotros llevamos la B-Next, de la que os hablaremos más adelante.
Presupuesto para viajar a Japón
Viajar a Japón no es barato, aunque hoy en día se pueda volar a Japón por muy buen precio. El alojamiento, el transporte y la bebida es lo más caro, y las visitas turísticas parece que no pero van sumando… En cambio la comida nos pareció bastante barata. Sea como sea, si encuentras un billete de avión a buen precio, te lo organizas con tiempo y buscas alojamientos de presupuesto bajo, vas a comer en restaurantes locales y no te pasas con la cerveza (que es muy cara), Japón es un viaje muy accesible para muchas personas.
- Vuelos: vuelo con KLM/AirFrance, ida Barcelona-Tokio y vuelta Osaka/Barcelona por 486’85€.
- Hoteles: alojándonos en hoteles de media calidad, bien situados y generalmente en habitación doble con baño compartido, nos hemos gastado 991€ en un total de 16 noches (que vendría a ser una media de 31€ la noche por persona). Aparte, otra noche nos alojamos en un ryokan, que como ya os explicaremos bien en su apartado. Nos costó 322€ una noche dos personas con desayuno y cena incluidas. Fue el capricho que nos dimos en este viaje.
- Comidas: a diferencia de lo que uno podría pensar, comer en Japón no es caro. Uno puede comer en muchos sitios por unos 600-900 yenes (lo que vendrían a ser unos 5-7€). Comer sushi suele costar unos 10€ por persona como mínimo, dependiendo de la calidad y de lo que escojáis (en los bufets giratorios veréis que hay platos con diferentes colores para distinguir los diferentes precios). Si os queréis dar algún lujo como comer carne de calidad wagyu, tipo Kobe, hida…o bien una comida kaiseki (alta cocina japonesa) entonces sí que la cuenta os puede subir más. Nosotros lo máximo que gastamos en un restaurante fueron 4.820 yens para cenar dos personas (20€ por cabeza), y fue una ocasión puntual. Tened en cuenta que la cerveza y cualquier otra bebida alcohólica (dícese vino por ejemplo) puede hacer subir mucho la cuenta. Una cerveza en un restaurante suele costar unos 500-600 yenes (4-5€). El mejor precio al que la encontramos fue por 400 yenes una caña pequeña… Así que os subirá más o menos la cuenta según lo que bebáis. Más teniendo en cuenta que el agua no te la cobran nunca, y en muchas ocasiones también te ofrecen té gratuitamente.
- Transporte: una de las cosas en la que os podéis dejar más dinero en Japón si no disponéis de muchos días. Eso sí, valdrá la pena ya que os permitirá recorrer grandes distancias en poco tiempo. Como ya os hemos comentado, nosotros compramos la JRPass de 14 días que nos costó 365€ por persona y nos cubría la mayor parte de desplazamientos. Solo tuvimos que comprar de más las tarjetas de autobús de Kioto, dos tarjetas de metro en Tokio (para los dos días en los que aún no teníamos activada la JRPass), el autobús de Takayama-Shirakawago-Kanazawa y el billete de bus al ryokan situado a las afueras de Takayama. Os puede parecer mucho, pero la JRPass nos cubrió los grandes desplazamientos, muchos de ellos hechos con shinkasen.
- Entradas turísticas: si algo tiene Japón son templos, por lo que debéis tener en cuenta que una parte del presupuesto se os irá para pagar las entradas de los templos, castillos, parques y demás atracciones turística. Nosotros nos ahorramos alguna visita, por ejemplo en Kioto, que los templos no te los acabas… Preferimos ver menos templos y bien, que todos y rápido. El precio de entrada a un templo te puede costar de 200 a 1500 yenes. Pero no sufráis porque en Japón hay muchas cosas que ver también que son gratis.
Visado
No se requiere de ningún visado para viajar a Japón. Para la gran mayoría de las nacionalidades se obtiene el visado hasta los 90 días sin coste alguno al llegar.
Sanidad y vacunas
Para viajar a Japón no se requiere de ninguna vacuna extra en especial. Eso sí, al igual que cuando viajamos a cualquier país que no es el nuestro (y más si es fuera de la unión europea) es muy recomendable que contratéis un seguro de viaje. Por cualquier cosa que pueda pasar…
Nosotros, cuando viajamos tan lejos de casa y durante días, siempre nos llevamos un pequeño botiquín con cuatro cosas básicas (con paracetamol, ibuprofeno, omeprazol…)
Consejos para viajar a Japón
– Descargarse el mapa del país en el móvil. Es muy útil, así no dependes en ningún momento de internet. Nosotros antes de viajar a cualquier sitio, nos descargamos el mapa del país al que vamos en la aplicación de MAPS.ME (desde que lo descubrimos que ya nunca viajamos sin él). Te localiza los lugares turísticos, los restaurantes, los hoteles… Es como un sistema gps que funciona sin internet.
– Tener la ruta más o menos clara y llevar los horarios de trenes ya mirados. Muy importante para no quedarte sin tren y sobre todo para aprovechar bien el tiempo. Nosotros llevábamos apuntados todos los horarios de los trenes que nos interesaban para nuestra ruta (incluso los de antes y de después, por cualquier imprevisto) gracias a la web HyperDia. En ésta solo tenéis que poner el lugar de origen y el destino y la hora aproximada de salida, y os dará las diferentes combinaciones de trenes que hay, así como información de la duración y, a veces, hasta del número de la vía a la que llega o sale el tren.
– Llevar una tarjeta que te permita sacar dinero sin comisiones, como la B-Next o la Revolut. Nosotros descubrimos la B-Next en este viaje y volvimos muy contentos. Se trata de una tarjeta VISA que no te cobra comisiones tanto si sacas dinero en un cajero como si pagas cualquier cosa con la tarjeta. Gestionas el dinero de tu tarjeta desde tu móvil, con la aplicación (puedes ingresar, enviar y recibir dinero muy fácilmente). Es muy práctico. Nosotros la pedimos y en menos de 48h horas ya la teníamos en casa, totalmente gratis. Además, si reserváis a través de este link os regalaran 5€!
– Llevar una guía de viaje: nosotros nunca viajamos sin nuestra guía Lonely Planet (coleccionamos las de todos nuestros grandes viajes). Es verdad que los restaurantes que recomiendan no son los mejores y que hoy en día encuentras mucha información (y mucho más útil) en internet, pero siempre va bien llevar una guía encima… Tienes la información al abasto en cualquier momento.
– Durante el viaje cambiar vuestro horario: madrugar para aprovechar muy bien el día (sobre todo si viajáis en otoño o invierno, para aprovechar al máximo las horas de sol) y para poder ver tranquilamente los lugares más turísticos. Nosotros nos sorprendimos de la cantidad de turistas que encontramos en Japón, sobre todo en Kioto. Algunos templos estaban abarrotados de gente a cualquier hora… Pero si madrugas, siempre tienes más opciones de ver cualquier sitio con poca gente. Además, muchos restaurantes cierran temprano, por lo que si cambiáis el horario también de las comidas y adelantáis la hora de ir a cenar, os será práctico.
– Llevar un adaptador de corriente: la clavija de los enchufes de Japón son generalmente del tipo A (aunque se dice que también hay alguna del tipo B, pero nosotros no la vimos durante todo nuestro viaje), por lo necesitaréis un adaptador de la corriente. Los adaptadores de este tipo son pequeños y baratos. Nosotros llevábamos un adaptador de enchufes universal, pero se nos estropeó el segundo día. En todos los hoteles nos dejaron un adaptador (en algún caso pagando), por lo que si os lo olvidáis tampoco es un gran problema.
Otra recomendación nuestra es que os llevéis siempre un ladrón, para poder enchufar el móvil, la cámara y todo lo que necesitéis cargar a la vez. Es muy práctico.
– Internet: leímos varias opciones para tener internet en todo momento en Japón (sim, pocket wifi…) y nos lo planteamos, pero finalmente preferimos prescindir de tener internet en todo momento. Cuando viajamos nos gusta tener nuestro momento de desconexión y no estar conectados en todo momento, para poder disfrutar más del viaje. Como nos descargamos el mapa de Japón tampoco nos hacía falta internet para ubicarnos ni encontrar las localizaciones. De todas maneras alucinamos con el sistema wifi público que hay allí. En las principales ciudades (Tokio, Kioto y Osaka) encuentras wifi pública gratis casi en cualquier sitio (y de muy buena calidad). De hecho en general en cualquier sitio puedes encontrar internet (restaurantes, hoteles, estaciones de tren, metro o bus…).
– Aprender alguna palabra japonesa y el protocolo básico: para sentiros más integrados siempre es recomendable aprenderse alguna palabra del idioma del país que visitáis. Por lo menos las salutaciones y el saber dar las gracias. Si además ya os leéis el protocolo básico y sus costumbres para conocerlas y respetarlas, mejor que mejor.
Nosotros nos aprendimos 4 básicos que utilizamos mucho:
- Para saludar: Konnichiwa (en excursiones de montaña os lo dirán todas las personas con las que crucéis, es su forma de saludar)
- Para dar las gracias: Arigatô gozaimasu (es como decir “muchas gracias”; Arigatô a secas no lo usan tanto). En el dialecto de la zona de Kansai gracias es: Ookini (este lo aprendimos en un restaurante en Kioto y a partir de entonces lo utilizamos mucho al despedirnos en los restaurantes)
- Para despedirse, decir adiós: Sayônara
- Para pedir perdón o disculpas: Gomen nasai
– Ropa: dependerá de la época del año en que vayáis. Nosotros en otoño encontramos una temperatura muy suave en Tokio, Kioto y Osaka, mientras que en la zona de los alpes y sobre todo en Miyajima, hacía bastante frío. Si en cambio vais a Japón en verano, prepararos para pasar mucho calor…así que llevad ropa ligera. En primavera y otoño es cuestión de ir a capas e ir sacando o poniéndose prendas, y en invierno abrigarse bien.
– Equipaje: una vez en Japón, si estás en un sitio de paso o llegas a una localidad mucho antes de la hora del check-in y no sabes qué hacer con tu equipaje, no te preocupes, en Japón no deberás cargar todo el día con él. Hay muchas opciones y facilidades. Te las explicamos:
- Consignas y taquillas: en Japón encontramos taquillas y consignas por todos sitios (sobre todo taquillas). En los aeropuertos, estaciones de tren, estaciones de metro, centros de información turística, centros comerciales… Por lo que vayáis donde vayáis, tendréis alguna opción donde dejar la maleta y no cargar con ella. Tened en cuenta que en las taquillas no se suele poder dejar la maleta más de un día, mientras que algunas consignas sí lo permiten. Encontraremos taquillas de diferente tamaño (pequeñas, medianas y grandes) y el precio varía entre 300 y 1000 yenes. Normalmente funcionan con monedas de 100 yenes. Tened en cuenta que las taquillas grandes en las localizaciones turísticas están muy solicitadas… Nosotros utilizamos mucho las taquillas, pero en Shirakawago no quedaban taquillas grandes y tuvimos que dejar las maletas en una consigna (que era más caro).
- Envío de maletas: en Japón tienen un servicio que funciona muy bien de traslado de equipaje, por lo que si no quieres cargar con tus maletas durante un traslado en transporte público puedes enviarte las maletas de tu hotel al siguiente hotel en el que te hospedarás. Hay que tener en cuenta que en la mayor parte de los casos el equipaje llega al día siguiente, por lo que se ha de hacer por avanzado el día antes de partir y hacerse una pequeña bolsa con lo necesario para una noche. Os avisamos por eso que no todos los hoteles ofrecen este servicio, a nosotros en una ocasión el hotel nos dijo que no nos lo podían hacer.
Dónde dormir
Al viajar en temporada alta tuvimos algunos problemas a la hora de encontrar hotel, sobre todo en las dos ciudades principales, Tokio y Kioto, donde tuvimos que coger dos hoteles diferentes durante nuestra estancia en cada una de ellas para que no se nos disparara el precio (los hostels con buena relación calidad-precio no estaban disponibles para el total de 5 días que queríamos estar en cada ciudad).
A la hora de elegir un hotel, siempre intentamos coger alojamientos económicos pero de buena calidad. Normalmente buscamos baño privado y desayuno incluido, pero en Japón si pides esto se te dispara el precio…así que decidimos prescindir de ello en algunos casos. Por otro lado, aunque intentamos no gastar mucho en alojamiento, también nos gusta darnos algún capricho en los viajes largos (que para algo son nuestras vacaciones). En esta ocasión teníamos claro que nos queríamos alojar por lo menos una noche en un ryokan con onsen.
Un ryokan es un alojamiento tradicional japonés, considerados actualmente como hoteles de lujo, que se caracterizan por tener las típicas puertas de madera correderas, futones y tatamis en la habitación, jardines tradicionales… Además suelen servir comida kaiseki (alta cocina japonesa) y disponer de bonitos baños termales (los conocidos onsen).
Vivir la experiencia de alojarse en un ryokan y disfrutar y relajarse en su onsen para nosotros es un imprescindible de cualquier viaje a Japón. No os lo podéis perder. Os contamos aquí nuestra experiencia.

Os dejamos aquí el listado de los hoteles en los que nos alojamos. Si queréis ver la información completa de cada uno de ellos la encontraréis en el post de cada uno de los lugares.
TOKIO:
- Asakusa Hostel Toukaisou: dos noches en una habitación doble con litera y baño compartido por 94€ (¥12.000)
- &AND HOSTEL KANDA: tres noches en una habitación doble con baño compartido por 152€ (¥19.440)
TAKAYAMA:
- J-Hoppers Hida Takayama Guest House: habitación doble de estilo japonés, con un futón doble, y baño compartido por 42€ (¥5.440)
- Yamazatonoiori Soene: ryokan con onsen. Habitación doble tradicional con media pensión (desayuno y cena) por 322€ (¥41.256)
KANAZAWA:
- Guest House Ochakare: dos noches en habitación triple de estilo japonés, con futones, baño compartido y desayuno por 105€ (¥13.500)
MAGOME:
- Tajimaya: habitación doble estilo japonés, con dos futones, con desayuno y cena incluidos y baño compartido, por 143€ (¥18.400)
KIOTO:
- Mosaic Machiya KSK: dos noches en habitación doble de estilo japonés, con dos futones, baño compartido y desayuno incluido por 167€ (¥21.420)
- Slow House Kyoto: dos noches en habitación doble dos camas con baño compartido por 125€ (¥16.000)
MIYAJIMA:
- Miyajima Guest House Mikuniya: dos futones en habitación triple compartida con baño compartido por 62€ (¥8.000)
OSAKA:
- J-Hoppers Osaka Guesthouse: dos noches en habitación doble con baño compartido y desayuno por 101€ (¥13.000)
Comer en Japón
Podemos decir sin duda alguna que Japón es uno de los viajes que hemos disfrutado más culinariamente hablando. Japón es un placer para todos los sentidos, pero sobre todo para el paladar, tanto para los amantes del sushi como para los que no lo son. Porque señores, quien crea que la comida japonesa es igual a sushi, va muy equivocado… Es mucho más que eso. Y lo mejor de todo, es una comida muy sana y de muy fácil digestión.
Otra de las cosas que nos sorprendió es que, a diferencia de en muchos otros sitios, en Japón comerás bien casi en cualquier sitio que te metas. Nos avisaron unos amigos que habían estado viviendo una temporada, que no nos obsesionáramos en ir solo a restaurantes recomendados porque comeríamos bien en cualquier sitio (y realmente lo comprobamos!).
Y finalmente el precio, como ya hemos comentado cuando hablábamos del presupuesto, se puede comer muy bien y muy barato. Aunque de tanto en tanto es recomendable darse un capricho y probar algún restaurante bueno… Pero si el dinero es limitante para vosotros, estáis de suerte, podréis comer muy bien y muy barato si así lo queréis. Tanto en restaurantes locales como en mercados, en Street food markets, como en supermercados! Sí, lo habéis oído bien, en los supermercados venden comida preparada muy buena y económica. Nosotros casi siempre desayunábamos de supermercado si no nos entraba el desayuno en el hotel.
Os dejamos aquí un listado de los platos japoneses más típicos que no os podéis perder:
– Ramen: cuenco de fideos en caldo (generalmente de cerdo, pero hay variantes con caldo de miso, de pescado…) que se sirven con guarnición (filetes de cerdo, brotes de judías, setas, huevo duro, cebolleta verde…).

– Sushi y sashimi: el famoso pescado sobre arroz o sin arroz, y sus muchas variantes (makis, temakis, uramakis…con alga, en tempura…) Tened en cuenta que los japoneses suelen poner ya el wasabi en el sushi por lo que si no os gusta pedirlo a parte o directamente sin, para aseguraros.

– Tempura o kakiage: trozos de verduras, gambas, langostinos o pescado hechos con un rebozado muy ligero y crujiente.
– Gyozas: también conocidas como “dumplings” o empanadillas japonesas. Normalmente se rellenan de carne o verduras (aunque hoy en día podemos encontrar rellenos de todo tipo) y se suelen hacer al vapor, a la plancha o fritas. Se acompañan normalmente de una salsa de soja.

– Okonomiyaki: conocida como la pizza o la crep japonesa. Se trata de una torta hecha con una masa rellena de col rallada y que puede llevar además cerdo, marisco, verduras y/o huevo. Normalmente en los restaurantes de okinomiyaki en las mesas hay una plancha donde se lleva éste para que se acabe de hacer y se sazona con mayonesa, una salsa roja japonesa dulce, finas lonchas de bonito y una especie parecida al perejil. Existen variantes en algunas zonas, como el hiroshima-yaki y negi-yaki. El primero es una variante de okonomiyaki que lleva fideos (a nosotros nos gustó más que el okonomiyaki básico) y el segundo es una variante que en vez de repollo lleva cebollino.

– Yakisoba: fideos fritos con carne, verduras, marisco y/o huevo. Muchos de los restaurantes especializados en okonomiyakis también lo son en yakisoba, por lo que te los sirven también encima de la plancha de la mesa.
– Sopa de miso: caldo hecho a base de algas cocidas en miso (que es pasta de soja fermentada). Es uno de los platos principales de la gastronomía japonesa. Lo sirven muchas veces como acompañamiento, tanto en desayunos, almuerzos, como cenas. Es común que lleve algún ingrediente más añadido, como tofu, alga wakame o cebollino.
– Soba: fideos de trigo sarraceno, finos y marrones. Se suelen servir en un caldo frio, aunque también se sirven con el caldo aparte, en el que hay que mojarlos.
– Udon: fideos blancos de trigo que suelen ser más gordos que los soba. Al igual que los soba, se pueden servir en caldo caliente o con el caldo frío aparte.
– Tonkatsu: filete de cerdo empanado y frito que se sirve con una salsa especial y se acompaña normalmente con arroz (y a veces también con ensalada).

– Katsudon: chuleta de cerdo frita/rebozada servida con arroz y huevo revuelto. A veces se acompaña de alguna salsa.

– Omurice: arroz frito con pollo y verduras envuelto en una fina tortilla. En muchos sitios se sirve con salsa, generalmente la más usada es una salsa de tomate tipo kétchup.
– Yuba: también conocida popularmente como la “nata de soja”, pues son las láminas que se forman al hervir la leche de soja.

– Yakitori: brocheta de pollo y verdura a la brasa.
– Sukiyaki: filetes finos de ternera cocinados en caldo de shõyu (de azúcar y sake) acompañados por verduras y tofu.
– Shabu Shabu: filetes finos de ternera y verduras que se cocinan removiéndolos en un caldo y que después se bañan en una serie de salsas hechas a base de semillas de sésamo y cítricos.
– Yakiniku: es un estilo de asar la carne cuyo origen es coreano. Se sirve carne de calidad cortada en finos trozos y se hace directamente en una parrilla que se dispone en la mesa.
– Okayodon: arroz con huevo y pollo.
– Tendon: arroz con tempura de gambas y verduras
– Dorayaki: pastel muy popular a raíz de la serie de Doraemon que consiste en dos bizcochos redondos con confitura de judía roja en medio (conocida como anko). Actualmente se hacen rellenos muy variados, como de chocolate.

– Mochi: postre dulce muy conocido que tiene forma circular y está hecho a base de arroz glutinoso o harina de arroz. El tradicional va relleno de anko también (como una pasta de confitura de judía roja), pero actualmente se hacen rellenos de todo tipo (té macha, chocolate, castaña…)
– Dango: postre japonés que consiste en unas bolas hechas de harina de arroz que se sirven pinchadas en una broqueta y se carameliza o se sirve con una salsa dulce. Existen variedades según la zona.

Además también podemos encontrar locales especializados en el fugu (pez globo), el unagi (anguila) y el cangrejo.
Otros términos de los que oiréis hablar
* Izakaya: son lo que nosotros llamaríamos bodega o pub, es decir, son locales donde los japoneses suelen ir a tomar algo (cerveza o sake generalmente) y cenar alguna cosa. Es muy común que tengan brasa y sirvan yakitoris. Muchos de ellos también suelen cobrar el cubierto (son los mismos que te sirven un pequeño aperitivo). Normalmente si cobran el cubierto lo informan con un cartel en la puerta o te lo dicen ellos mismos solo entrar.
* Bento box: se trata de las populares cajas preparadas con comida para llevar. No es una simple caja o fiambrera, sino que hablamos de una caja que puede estar compartimentada o no, y que presenta muy bien una ración de comida para una persona. Son platos muy completos en que, aún siendo una opción de comida rápida y más asequible, la calidad de la comida suele ser bastante buena. Eso sí, la gran mayoría van en cajas de plástico, por lo que no son muy recomendables (menos si se abusa). Podemos encontrar bento box en supermercados o en tiendas especializadas en éstas.

* Cocina kaiseki: se trata de alta cocina japonesa, todo un ritual gastronómico. Nació en Kioto, como un complemento de la ceremonia del té. La comida se va sirviendo en pequeños platitos y cuencos, todos ellos muy bien cuidados, no solo por el gusto sino también estéticamente. E como hacer una cena de degustación. La mayoría de los ryokan sirven este tipo de cocina.

Comida callejera
– Onigiri: bola o triángulo de arroz relleno con uno o vario ingredientes y envuelto en alga nori. Los rellenos pueden ser muy variados (salmón, atún con mayonesa, pollo teriyaki, verduras al curry, huevo, cangrejo, azukis…)

– Tako-yaki: pequeña bola redonda echa a base de una masa de harina de trigo rellena de pulpo que se sirven con jengibre encurtido, aonori, láminas de bonito, mayonesa y una salsa roja.

– Korokke o croquettes japonesas: son una especie de croquetas grandes, normalmente con una forma más aplastada, hechas a base de patata y cebolla (sin bechamel). Hay versiones que además llevan carne de cerdo picada en su interior.
– Tamagoyaki o tortilla enrollada: tortilla de huevo enrollada muy típica del desayuno japonés. Tiene un gusto dulzón puesto que se hace con salsa de soja.

– Shumai o Shao Mai: los conocidos dumplings de origen chino. Son como raviolis de pasta de arroz rellenos generalmente de carnde de cerdo, pero también podemos encontrarlos rellenos de verduras, pescado u otras variantes.
– Karaage: trozos de pollo fritos en abundante aceite de manera que quedan muy crujientes.
– Boniato: lo hemos visto cocinado de mil formas, hecho a la brasa, frito a gajos o tiras (como si fueran patatas fritas), frito a tiras pero con azúcar por encima, caramelizado… Un snack barato y buenísimo.

Comer en los supermercados
Como os hemos dicho en Japón se come bien en cualquier sitio, hasta en los supermercados. Normalmente la gente se lleva la comida, pero encontramos algunos que tenían algunas mesas para sentarse a comer. Nosotros los frecuentamos mucho para desayunar, para picotear algo entre horas o para cenar alguna noche que habíamos llegado demasiado tarde a nuestro nuevo destino. Nos viciamos principalmente a los onigiris (sobre todo a los de huevo, de atún con mayonesa o de pollo con salsa teriyaki), a las gyozas, a los shumai y a las croquettes. Estos tres últimos te los calientan en un microondas. También el café, aunque sale más a cuenta comprarte el café o el té en las máquinas callejeras, de donde salen calientes!!! Nos hicimos muy fans de éstas…
Supermercados más típicos y recomendados: 7eleven, Family Mart y Lawson.
Ejemplos de algunos precios:
- Oniguiris: 100-150 yenes (dependiendo del tipo y del super).
- Croquette de mash potato: 80 yenes.
- Gyozas: 240-350 yenes.
- Agua pequeña: 100 yenes.

Bebidas
– Sake: es conocido como «la bebida de Japón». Se elabora con arroz, agua y un molde llamado kõji que ayuda a convertir el almidón del arroz en azúcares fermentados. Se puede tomar caliente o frío, aunque caliente es la forma más común y para nosotros la más buena (entra más fácil y se nota menos el alcohol…).
– Té verde: es el té más común en Japón, y en especial el té matcha. Este se puede encontrar en polvo, el cual se bate hasta alcanzar una cierta consistencia. En muchos restaurantes el té es gratis, al igual que el agua.
– Cerveza: las marcas más comunes son Kirin, Sapporo y Asahi. La más común es la rubia. En todos sitios encontramos cerveza, incluso en máquinas expendedoras, pero no es para nada barata. Una cerveza en un bar cuesta alrededor de los 500 yenes (más por arriba que por abajo). Las latas pueden llegar a costar 250 yenes como mínimo.
– Café: no es una bebida típica para nada de Japón pero podéis encontrar en cualquier sitio. En algunas cafeterías puede llegar a ser bastante caro… Nosotros nos aficionamos a comprarlo en las máquinas de la calle, al igual que el té o las botellas de agua. El café y el té además de ser baratos son calientes!! Más de un día nos sirvieron para calentarnos las manos a primera hora de la mañana.

Algunas curiosidades de Japón
- Apenas hay papeleras en los lugares públicos, en la calle. Y las pocas que hay suelen encontrarse al lado de las máquinas de bebidas y comida que encontramos en la calle. Nos interesamos por saber la razón de esto y leímos que era para concienciar a la sociedad de la cantidad de residuos que generaban. En los puestos callejeros la gente come lo que ha comprado y vuelve al mismo puesto a tirar el envoltorio, la bolsa o cualquier otro residuo de éste.
- Los lavabos son muy modernos y diferentes a lo que estamos acostumbrados. Las tazas del váter suelen estar calientes (tienen un sistema que la mantiene calentita) y en muchos lavabos de hoteles hay un sistema de higiene peculiar que consiste en un chorro de agua que sale del váter para limpiarse. Aun así, no os preocupéis porque nunca falta el tradicional papel de váter.
- Son muy ordenados; tienen un orden establecido para desplazarse, tanto por las estaciones, las escaleras, como por la calle. Normalmente van por la izquierda, y cuando no es así, lo encontrarás señalizado con flechas en el suelo o las escaleras (nosotros nos encontramos más de una vez yendo al contrario que todo el mundo, por la derecha).
- Son muy silenciosos, en el tren, metro, bus y otros sitios públicos suelen estar en mucho silencio. Y todos mirando al móvil (aunque esto ya pasa en otros sitios). Pero nos sorprendió ver que apenas hablan en voz alta ni yendo acompañados.
- Al entrar y salir de un restaurante suelen saludarte todos (camareros, cocineros, responsable…). En algunos lugares da impresión si dejan de hacer lo que están haciendo por un momento y te saludan todos a la vez!
- Cenan temprano. Algunos restaurantes, sobre todo los que se encuentran fuera de zonas turísticas, cierran muy temprano, sobre las 21h.
- Nunca dan propinas y, por lo que leímos, parece ser que incluso pueden ser mal vistas.
- Los japoneses sorben el ramen puesto que dicen que así se aprecia más el sabor del caldo. Está visto por tanto como algo positivo, de buena educación. En un restaurante de ramen es curioso ir escuchando los sorbidos de los comensales…
- Suelen comer muy rápido, no pierden el tiempo haciendo sobremesas ni nada. En algunos restaurantes incluso te toman nota cuando estás esperando en la cola, te sirven tan pronto te sientas, y esperan que te vayas y dejes el sitio libre para otro comensal tan pronto como acabas.
- Es común ver por la calle gente con mascarilla. Se dice que el principal uso es tanto para evitar respirar la contaminación como evitar contagiar a los demás en caso de estar enfermos.
- Trabajan mucho. Leímos que hay un dicho muy utilizado en Japón: “Muerte por trabajo”. Pues trabajan mucho y muchísimas horas… Los domingos está todo abierto. De hecho parece que trabajen más y todo porque algunas calles principales las hacen peatonales para facilitar el tránsito de las personas y el consumo. También leímos que aquí no está muy bien visto hacer vacaciones…
- La cerveza es cara en todos los sitios. En ocasiones, hasta la comida puede costar menos que la cerveza.
- Hay muchísimos lavabos públicos en todos sitios, sobre todo en parques y localizaciones turísticas.
Protocolo básico
- Los japoneses son muy limpios y ordenados. Se sacan los zapatos siempre al entrar en las casas, lo mismo en los hoteles y en los templos. Es muy importante pues sacarse los zapatos, sobre todo para pisar tatami.
- Se debe hablar bajo en los templos, ya que es un sitio religioso.
- Cuando se dan o reciben obsequios o la tarjeta visa después de pagar, ellos siempre lo hacen cogiéndolo con las dos manos.
- Saludar siempre al entrar y salir de un lugar. Los japoneses son muy correctos y educados, veréis que ellos siempre lo hacen.
- En el restaurante ellos actúan siempre llenando el vaso del acompañante y esperando a que él nos llene el nuestro. Nunca se sirven la bebida a uno mismo…no está bien visto.
- Protocolo básico de un onsen:
- En la mayoría de onsen públicos no permiten los tatuajes, están mal vistos.
- Hay que desnudarse, dejar la ropa en la cesta o taquilla, y entrar solo con una toalla.
- Hay que lavarse antes de entrar en el baño.
- Antes de regresar al vestuario hay que secarse bien.

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